Los 10 mejores hoteles de Mallorca

En una zona aislada de la bahía de Palma, una antigua fortaleza se alza sobre un acantilado: bienvenido a Cap Rocat, un hotel de cinco estrellas de piedra arenisca. Diseñada para integrarse en la reserva natural de 30 hectáreas que la rodea, la ciudadela fortificada restaurada, con patios rodeados de palmeras, almenas y torres de vigilancia, está excavada en el acantilado y declarada Monumento Nacional. En su interior, elegantes suites con camas con dosel y piscinas privadas ofrecen la máxima tranquilidad en este lujoso refugio con vistas a una reserva marina.

Al oeste de Palma, cerca de Cala Major, el Nixe Palace es un hotel de cinco estrellas enclavado en una ladera sobre la playa con vistas a la vasta extensión del mar Mediterráneo. La piscina y la zona de terrazas comparten estas espectaculares vistas y las habitaciones combinan la elegancia con el confort supremo con interiores clásicos y neutros. El spa y la zona de bienestar son perfectos para relajarse y mantener una rutina de ejercicios, y el Bistro 269 sirve alta cocina mediterránea en la terraza de ensueño.

Como su nombre indica, este hotel de cinco estrellas sólo para adultos está inspirado en Marruecos, con interiores de madera suavemente iluminados y destellos de ricos tejidos en tonos joya. Las palmeras del patio dan a una piscina y a una exótica terraza iluminada con farolillos. Cada suite es única, con grandes camas dobles y un suntuoso mobiliario, que incluye alfombras marroquíes e intrincados detalles. El Morokko Bar and Restaurant ofrece cocina de fusión y cócteles preparados por expertos: una joya morisca en el centro de Palma.

En la costa oriental de la isla, Pleta de Mar es un hotel de cinco estrellas rodeado de naturaleza y con vistas al mar Mediterráneo. Este hotel de lujo cuenta con 2 piscinas infinitas y una terraza con camas balinesas, servicios de bienestar y un servicio de conserjería que crea excursiones a medida.

Para una estancia que le llevará de vuelta a la naturaleza, este hotel rural en el salvaje noreste de Mallorca ofrece la tradicional sencillez y tranquilidad mallorquina a un nivel de cinco estrellas. Situado dentro del Parque Natural de la Península de Llevant, cerca del pueblo de Artà, esta finca agrícola del siglo XIII alberga ahora ocho habitaciones en el edificio principal de piedra, lleno de carácter y encanto del viejo mundo. La decoración favorece la estética rústica mallorquina: paredes encaladas, techos con vigas y tejidos naturales.

En el corazón del casco antiguo, este hotel boutique está escondido en una calle lateral rodeada de edificios históricos. Esta mansión reformada con arcos góticos, que data de 1576, combina un rico patrimonio con un confort y un estilo modernizados, proporcionando una base ideal para cualquiera que desee alojarse en una de las zonas más deseadas de la ciudad. El spa y el restaurante de estilo mediterráneo son ventajas añadidas.

Junto al Paseo del Borne, en el centro de la ciudad, Summun es un hotel boutique de cinco estrellas ubicado en un palacio del siglo XV construido en época gótica. Convertido en un hotel de lujo con 18 suites elegantemente decoradas, incluida una con un fresco pintado a mano en el techo, Summun alberga el salón 1874 con terraza, el lugar perfecto para disfrutar de un cóctel tras un día de turismo.

A las afueras de Es Capdellà, un bonito pueblo de Calvià, en el suroeste de la isla, Castell Son Claret es un hotel de cinco estrellas situado en un campo de 326 hectáreas a los pies de la sierra de Tramuntana. Este antiguo castillo del siglo XIX es una de las fincas privadas más grandes de la isla y ofrece 43 habitaciones y suites en interiores meticulosamente renovados. Experimente la naturaleza en estado puro y el lujo en su máxima expresión, a sólo 30 minutos de la ciudad de Palma.

El sureste de la isla está decorado con algunas de las mejores playas de la isla y hoteles como Can Ferrereta, una mansión del siglo XVII con cinco estrellas y 32 habitaciones y suites donde el estilo mediterráneo se combina con un diseño vanguardista y comodidades ultramodernas. El bar y restaurante Ocre es un espacio excelente para pasar las tardes antes o después de explorar el encantador pueblo tradicional de Santanyí.

Serena por nombre, sereno por naturaleza, este hotel de cinco estrellas situado en una finca de 40 hectáreas en el centro de Mallorca no está lejos de los pueblos de Montuïri y Algaida. Con viñedos, exuberantes jardines y una idílica piscina, es un lugar de retiro recomendado para los que quieren alejarse de todo y probar un trozo de la vida rural de la isla. Además de yoga y bienestar, el restaurante Jacaranda del hotel utiliza productos de los huertos, frutales y 900 olivos.

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