Valldemossa se asienta en lo alto de la sierra de Tramuntana de Mallorca, enmarcada por pintorescas vistas, en parte en forma de anfiteatro. El pueblo data del siglo XIII, situado en un estrecho valle, rodeado de frondosos prados y valles de olivos y almendros. El edificio más antiguo del pueblo es la Iglesia de Sant Bartomeu, construida en el siglo XIV en estilo gótico y considerada una de las más antiguas de Mallorca.
Valldemossa es conocida por su belleza y hospitalidad, y ofrece a los visitantes una experiencia única e íntima. El pueblo se caracteriza por sus sinuosas calles empedradas bordeadas de luminosas casas encaladas, algunas con característicos tejados de pizarra negra, que le confieren un aire mediterráneo clásico. También es famoso por su gran variedad de delicias locales.
La ciudad acoge varios festivales anuales, como el tradicional concurso de viñedos, que se celebra cada agosto en la cercana Porreres y atrae a multitudes de toda la zona. Eventos culturales como la Procesión de Semana Santa, que se celebra cada Viernes Santo, atraen a gente de todas las clases sociales para conocer las tradiciones y el colorido locales.
Valldemossa es un destino muy solicitado gracias a sus impresionantes paisajes, su cultura e historia únicas y la amabilidad de sus habitantes.