El coste de la vida en Mallorca: Una visión realista

Los precios de la vivienda en Mallorca están entre los más altos de España e incluso del mundo. Según un estudio, la isla sólo se sitúa por detrás de Hong Kong y Sudáfrica en cuanto a aumentos de precios. La atractividad de Mallorca como lugar de residencia impulsa la demanda y, por tanto, eleva los precios. Muchos locales ya apenas pueden permitirse una vivienda en propiedad, ya que la relación entre los ingresos y el valor de las propiedades es desproporcionadamente alta. La regulación de plataformas como Airbnb ha cambiado poco la situación. Quienes piensen en comprar o alquilar aquí deberían esperar que esto sea un gran factor de coste.

Los precios de la vivienda en Mallorca están entre los más altos de España e incluso del mundo. Según un estudio, la isla sólo se sitúa por detrás de Hong Kong y Sudáfrica en cuanto a aumentos de precios. La atractividad de Mallorca como lugar de residencia impulsa la demanda y, por tanto, eleva los precios. Muchos locales ya apenas pueden permitirse una vivienda en propiedad, ya que la relación entre los ingresos y el valor de las propiedades es desproporcionadamente alta. La regulación de plataformas como Airbnb ha cambiado poco la situación. Quienes piensen en comprar o alquilar aquí deberían esperar que esto sea un gran factor de coste.

Mientras que los alimentos importados pueden ser caros, los mercados locales ofrecen alternativas asequibles. El transporte público también es relativamente barato: autobuses y trenes son una opción cómoda para recorrer la isla sin altos costes. Para residentes, los vuelos dentro de España pueden ser extremadamente baratos gracias a descuentos. Quienes compran de forma inteligente y utilizan comercios españoles en lugar de proveedores internacionales también pueden ahorrar considerablemente.

Mucha gente en Mallorca trabaja a tiempo completo y aun así encuentra difícil ahorrar. Los residentes internacionales con los salarios típicos españoles a menudo se sienten con restricciones financieras, ya que los altos costes de alquiler consumen gran parte del ingreso. Aun así, a menudo prevalecen los aspectos positivos de la vida aquí: el clima, la naturaleza y la cultura compensan mucho.

Algunas cosas son especialmente económicas en la isla: la gasolina es más barata que en Reino Unido; las tarifas de aparcamiento en el aeropuerto de Palma son mucho menores que en Gatwick; las tapas o el café en pequeños bares suelen costar menos de dos euros — una auténtica ganga en comparación con las grandes ciudades europeas. Los expertos recomiendan además peluquerías españolas o mercados para comprar alimentos en lugar de proveedores orientados internacionalmente.