Palma cambia a permisos de aparcamiento digitales — desaparecen las pegatinas ORA

Fin de las pegatinas azules: qué cambia para los vecinos

Quienes aparcan en una zona ORA azul en Palma tendrán que adaptarse el próximo año. El ayuntamiento planea sustituir las conocidas pegatinas azules en el parabrisas por un permiso de aparcamiento digital. En lugar de una matrícula en papel, será la propia matrícula del vehículo la que determine la autorización: escáneres en los accesos y sensores en la calle comprobarán si un vehículo está autorizado.

La cuota se mantiene, el control será electrónico

La tasa anual se mantiene sin cambios en 24 euros, informa el consistorio. Para muchos, el detalle más importante: no será más caro que ahora. Pero la forma de control cambiará notablemente. Ya no habrá pegatinas; en su lugar habrá que registrarse con la matrícula y acreditar la residencia, de forma online a través del portal del ayuntamiento o presencialmente en las oficinas, según el anuncio.

Esto parece sencillo, pero tiene consecuencias prácticas. Personas mayores que hasta ahora simplemente pegaban la etiqueta tendrán que incorporarse a un sistema digital o pedir a alguien que rellene el formulario. Vecinos de la Plaça Major o de la Avinguda Gabriel Roca lo notarán pronto cuando los primeros lectores de matrículas realicen las comprobaciones matinales.

Ampliación de la zona azul en proyecto

Paralelamente a la digitalización, Palma anuncia que ampliará las zonas ORA en 2026. Estarían afectadas, entre otras, partes de Es Fortí y Pere Garau, según la administración. Quienes hasta ahora vivían fuera de una zona deberían replantearse sus hábitos de aparcamiento: las plazas para residentes podrían escasear si se introducen nuevas áreas.

Preguntas prácticas y preocupaciones

En el barrio se escuchan reacciones encontradas. Comerciantes de la Carrer de Sant Miquel se muestran escépticos: "Para clientes que solo entran un momento debe haber excepciones sencillas", dice una propietaria de panadería. Otros celebran el control simplificado: sin pegatina, sin suciedad en el salpicadero, y el ayuntamiento ahorra papel y gestión administrativa.

La protección de datos sigue siendo un tema. Los lectores de matrículas recuerdan a muchas personas a las cámaras en los cruces. El ayuntamiento asegura que los datos solo se usarán para el control de estacionamiento y que se almacenarán por un tiempo limitado. Si eso será suficiente para todos, está por ver.

Cómo prepararse

Quienes estén afectados deberían registrarse con antelación. Mi recomendación: tener los documentos a mano (DNI, contrato de alquiler o factura de electricidad como comprobante de residencia, documentación del vehículo). En muchos casos se podrá hacer todo online; quienes tengan dudas pueden acudir durante la primera semana del despliegue al mostrador del ayuntamiento, donde suelen haber responsables que ayudan paso a paso.

Al final es una modernización práctica, pero que necesita tiempo. Para unos supone una pequeña comodidad; para otros, un cambio y nuevas preguntas. Un consejo: sigan las comunicaciones del Ayuntamiento y pregunten al vecino si ya se ha registrado. Eso evitará problemas por la mañana cuando los escáneres hagan las primeras comprobaciones.