Parc de la Mar en Palma, basura y residuos junto a la catedral, señal de abandono.

Vecinos alarmados: Parc de la Mar descuidado – basura, colillas y restos a los pies de la catedral

👁 3124✍️ Autor: Lucía Ferrer🎨 Caricatura: Esteban Nic

El parque bajo la catedral de Palma parece descuidado: vecinos denuncian basura, colillas y problemas de higiene a pesar de una reforma anterior.

Lo que frente a la catedral empezó bonito se está desmoronando

Quien baja por la mañana la escalera desde el Passeig Mallorca y mira hacia el Parc de la Mar se sorprende. Ya en el paseo junto al agua hay más basura de lo normal: vasos de plástico, papel, restos de comida. Bajo los árboles sombreados se acumulan bolsas, tampones y —sí, lamentablemente— excrementos. El área del parque infantil, donde a las 10 de la mañana los niños prefieren trepar, algunos días parece abandonada porque los padres se sienten incómodos.

Las voces del barrio

«Casi salgo todos los días con el perro a las 7:30», dice Carmen, que lleva 15 años viviendo en Sa Calatrava. «Antes todo estaba limpio, ahora a menudo parece un vertedero. Los bancos están cubiertos de colillas y a veces huele mal». Otro vecino, un maestro jubilado, cuenta que por las noches hay gente durmiendo entre los arbustos. «La falta de vivienda es un problema, sin duda. Pero eso no significa que el parque tenga que verse así».

La zona con la cuenca de agua de mar artificial se renovó hace años: caminos nuevos, palmeras recién plantadas, mejor iluminación. Aun así, los vecinos se quejan de que el mantenimiento regular ha disminuido: los céspedes no se cortan a tiempo, las zonas descuidadas no se limpian y los papeleros se desbordan.

¿Quién es responsable?

La limpieza urbana corresponde al Ayuntamiento de Palma. Por supuesto hay horarios y empresas contratadas, pero los demandantes del barrio dicen que los controles son irregulares, sobre todo los fines de semana y durante las noches de verano, cuando hay mucha gente. Un portavoz de la asociación vecinal pidió recientemente más presencia y vaciados más frecuentes de las papeleras.

Consecuencias prácticas: la suciedad atrae ratas, empeora el bienestar y ahuyenta a los visitantes. Para un área que está junto a la catedral y atrae turistas a diario, es malo para la imagen y para quienes viven aquí.

¿Y ahora?

A corto plazo los vecinos piden mayor frecuencia de limpieza, más papeleras y controles puntuales en las horas de la tarde. A medio plazo está sobre la mesa si las ofertas sociales para personas sin hogar podrían ayudar a estabilizar la situación.

Seguiré vigilando la situación en las próximas semanas y, por supuesto, recordaré a los concejales que un parque no es un basurero. Si pasea junto a la catedral: por favor, no tire su basura despreocupadamente. No es un llamamiento, sino una pequeña contribución que todos podemos hacer.

Noticias similares