Mallorca Magic Logo
Portaaviones estadounidense frente a Palma: Advertencia a las embarcaciones – «Salgan de la zona»

Portaaviones estadounidense frente a Palma: Advertencia a las embarcaciones – «Salgan de la zona»

👁 2178

El USS Gerald R. Ford se encuentra en la bahía de Palma. El portaaviones advirtió a las embarcaciones civiles para abandonar la zona de exclusión; en la isla esto ha generado debates y cafés llenos.

Alarma en la bahía: el portaaviones exige a las embarcaciones mantener la distancia

El domingo al mediodía, alrededor de las 13:30, residentes del Passeig del Born y capitanes en el puerto escucharon el mismo mensaje: una llamada de radio del portaaviones estadounidense más grande en la bahía de Palma. «Salgan de la zona, o podrían tomarse medidas defensivas», dijeron, según varios testigos. Para muchos fue inusual: el lenguaje militar se mezcla de pronto con el murmullo de gaviotas y tazas de café.

Entre disuasión y nervios

El USS Gerald R. Ford ha estado anclado durante varios días y se espera que permanezca aún varias semanas. El buque es enorme, más de 300 metros de eslora, con una tecnología compleja a bordo. Quien intentara acercarse demasiado a la zona señalada, oyó claramente que eso podría volverse peligroso. El jefe de puerto y marineros locales confirmaron que hubo varios mensajes de radio, que también se emitieron en inglés.

En los cafés de Palma, algunos se relamen las manos: 4.500 marines y miembros de la tripulación significan ingresos para restaurantes y taxistas. Otros vecinos reaccionan con inquietud. «Uno quiere mañana ir en barco a Cala, sin que nadie ponga la bandera a media asta», dijo un padre de Portixol que no quiso ser identificado. En algunas calles se veían pancartas de protesta; en Passeig Mallorca colgaba un cartel claro de «No Army».

Técnica, presencia, política

El portaviones trae aviones modernos, centrales de energía a bordo y tecnología de despegue que lo distingue de los barcos más antiguos. No es un espectáculo: estos buques son sobre todo plataformas logísticas y militares. Para observadores políticos, la visita es una muestra visible de la presencia internacional: disuasión, efecto de señalización y tema de conversación en el ayuntamiento.

¿Qué significa esto en concreto? Para los navegantes recreativos rigen ahora reglas estrictas: mantener la distancia, respetar las instrucciones por radio y respetar posibles zonas de seguridad. Quien no lo haga, no solo arriesga multas, sino que como advierte la advertencia, en el extremo también podrían aplicarse medidas más duras.

Cómo vive la isla esto

Durante el día se ve al personal militar en los cafés del puerto, por la noche algunas calles se llenan de discusiones sobre seguridad y soberanía. Un conductor de taxi me explicó que una noche normal con varios huéspedes estadounidenses puede aportar rápidamente entre 300 y 500 euros extra. Una propietaria del Mercado de Olivar comentó secamente: «El dinero es dinero, pero el ambiente no siempre mejora».

Para los próximos días la situación se mantiene tensa, pero tranquila. La autoridad de Puertos y Seguridad enfatizó que se mantiene en contacto con las autoridades estadounidenses. Si posees un barco: lo mejor es llamar temprano, comprobar el canal de radio y no confiar en tu afán de aventura.

Voces locales, breves observaciones y un poco de chisme portuario: así se siente Palma en estos días, mientras un buque muy grande continúa dando vueltas.

Noticias similares