Vista de Es Carnatge con senderos, vegetación costera y el aeropuerto al fondo

Nuevo intento para Es Carnatge: ¿millones para caminos, iluminación y verdadera conservación?

👁 3784✍️ Autor: Ricardo Ortega Pujol🎨 Caricatura: Esteban Nic

Palma inicia la primera fase de obras para la mejora de Es Carnatge: alrededor de 2,2 millones de euros para caminos, iluminación y medidas ecológicas. La pregunta central sigue siendo: ¿son suficientes el dinero y el plan para proteger a largo plazo el espacio costero?

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En una mañana ventosa, cuando el olor a agua salada y a hierba recién cortada atraviesa Ciudad Jardín y los motores del aeropuerto suenan rítmicos a lo lejos, Es Carnatge muestra su lado contradictorio: un espacio abierto popular para los madrugadores, pero también un entorno natural sensible en las afueras de la ciudad. El ayuntamiento de Palma ha aprobado ahora la primera fase de obras para la mejora de este tramo costero: cerca de 2,2 millones de euros para caminos, iluminación y primeras medidas ecológicas. La pregunta central sigue siendo: ¿alcanzará el dinero y la planificación para proteger realmente Es Carnatge?

Dos etapas, muchas expectativas

El proyecto se divide en dos grandes fases. Primero la restauración ecológica y la revisión de la red de senderos; más adelante se realizarán trabajos de limpieza del fondo marino alrededor del antiguo recinto militar y otras adaptaciones constructivas. Suena razonable: reforzar los hábitats para especies autóctonas, reducir las invasoras, tapar los baches en el pavimento. Pero el orden, la duración de las intervenciones y la coordinación entre las medidas suelen decidir el éxito o el fracaso, y eso a menudo se pasa por alto en el debate público.

Más luz, ¿pero cómo?

Se prevén más de cien nuevos puntos de iluminación, con una inversión en alumbrado de unos 156.000 euros. La portavoz municipal Belén Soto insiste en que no debe ser una luz deslumbrante, sino una 'modernización sensata'. Es una frase que se oye en muchos municipios. La cuestión es: ¿cómo se define 'sensata' en la protección de aves, murciélagos e insectos? Ya hoy se oyen por las noches los susurros de las aves y se ve a aficionados con cámaras siguiendo el aterrizaje de los aviones. El tipo de iluminación equivocado puede alterar ese equilibrio de forma sensible.

Trabajos concretos y lo que a menudo falta

Están previstas nuevas pavimentaciones en el Camí de Establecedores, el Camí de Can Pastilla y la calle Dentol, mejor drenaje, vallados de madera y señalización de áreas sensibles, además de bancos y aparca bicis. Estas medidas son visibles y tienen efecto rápido: los baches desaparecen, la carrera matutina es más agradable. Pero los planes de mantenimiento para los años siguientes son clave. ¿Quién se encargará de la retirada periódica de plantas invasoras? ¿Quién sustituirá las vallas deterioradas? El ayuntamiento menciona planes de mantenimiento para los próximos años; sin embargo, los detalles sobre financiación y responsabilidades siguen siendo vagos.

Lo que apenas se discute

Cuatro aspectos están a menudo poco representados en la discusión pública: las consecuencias de la limpieza del fondo marino en biotopos locales, la financiación a largo plazo del mantenimiento, la elección de tecnología compatible con la oscuridad y la participación de los usuarios locales. Palabras clave: perturbaciones temporales de organismos bentónicos al limpiar el fondo, costes posteriores por la reutilización de fondos ITS, la necesidad de luminarias cálidas y de bajo impacto térmico y contratos de cuidado participativos con grupos vecinales.

Oportunidades y propuestas concretas

Para que la inversión sea sostenible propongo algunos pasos pragmáticos: 1) licitar la iluminación con certificación dark-sky y LEDs regulables de luz cálida; 2) crear un pequeño fondo de mantenimiento con una parte de los fondos ITS y criterios claros de gasto; 3) patrocinios ciudadanos para tramos concretos de caminos (community stewardship) combinados con monitorizaciones regulares por ONGs y equipos universitarios; 4) técnicas cuidadosas en la limpieza del fondo marino, acompañadas de estudios biológicos previos y posteriores.

Mirando hacia adelante

Es Carnatge se extiende desde Cala Gamba hasta Can Pastilla, un tramo que muchos vecinos usan a diario. La mejora puede ser una ganancia: menos baches, accesos más claros, más plantas autóctonas. Pero si Palma no toma en serio el mantenimiento a largo plazo, la iluminación sensible y las consecuencias para el fondo marino, el ayuntamiento debe ofrecer respuestas ahora, no después del último acto de obra. Si no, se gastará mucho dinero y la naturaleza quedará al margen.

Quien salga a correr por la mañana por el Camí notará primero los cambios: caminos más firmes, nuevos bancos, tal vez más cantos de aves. El reto es que estas mejoras no sean solo un placer pasajero, sino que perduren para la gente y para la naturaleza. Esa es la tarea real y debemos planteárnosla como comunidad mientras las excavadoras aún trabajan.

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